Si de visita estas en el D.F, una parada obligatoria es Xochimilco por toda la riqueza
que alberga desde tiempos de la colonia. Construcciones, paisajes, artesanía,
cesterías, alfarería, parques, trajineras y alimentos típicos de la región
ponen en alto el nombre de Xochimilco como patrimonio cultural de la humanidad.
Al
entrar al centro de Xochimilco podrás notar el embarcadero Fernando Celada Miranda uno de los 8
embarcaderos distribuidos en todo el centro de Xochimilco, ahí en 1936 empezaron a realizarse paseos turísticos
en canoas con techos de lona o manta. El embarcadero fue inaugurado en 1967
para la Olimpiadas de México 68.
Caminando
más al centro, uno de los lugares que más te sorprenderán por su belleza tanto por fuera como por dentro
es el Templo y Convento de San Bernardino, el monumento histórico más atractivo
de Xochimilco. Fundado por Fray Martín de valencia, se comenzó a construir
hacia 1535 a cargo del Fray Alonso de Soto.
Por dentro destacan grandes
imágenes, pinturas así como un estupendo retablo plateresco figura en su altar
principal, catalogado como uno de los tres más valiosos del México del siglo
XVI.
Al salir del templo en el arbolado Jardín Juárez, corazón del pueblo
xochimilca, no puede faltar el clásico quiosco con techumbre cónica revestida
de teja. A dos cuadras de ahí, al norponiente, se encuentra la Plaza de San Juan Bautista
núcleo del barrio del mismo nombre, uno de los 17 que conforman Xochimilco. Sus
habitantes presumen esta pintoresca plaza con su gigantesco ahuehuete de 2,000 años de
antigüedad y 35 metros de diámetro en su fronda.
Así que cuando visites el D.F no olvides visitar Xochimilco y disfrutar
de su comida, así como visitar los mercados de plantas donde podrás observar diferentes
variedades de flores, así como macetas de
barro y alfarería.
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